domingo, 31 de enero de 2010

Mamá, quiero una BlackBerry

Nos hacemos mayores, cambiamos, maduramos... pero a un ritmo bastante más moderado que nuestros pequeños compañeros de fatigas. Ese que ya es parte de tí, sin el que te sientes incomunicado; ese que, por encima de sus infinitas funcion es, miras para consultar la hora haciéndole el vacio al analógico reloj.


"Pero como has crecido!" Íncreible como pueden cundir 25 añitos. THE EVOLUTIÓN OF MOBILE PHONES
Y manaña... Diós, dirá!

No hay comentarios:

Publicar un comentario