sábado, 26 de noviembre de 2011

El físico NO importa... tanto.

Lo novedoso no supera fácilmente a lo tradicional. Todo requiere un periodo de adaptación y evolución para conseguir ser mejor que aquello ya existente. Esta máxima es aplicable en muchos campos pero, hoy, habla de diseño.

Hace un par de semanas descubrí entre las opciones de blogger las nuevas "vistas dinámicas". Aquello me sonó a "pelotazo" de interactividad. Y sin duda, el formato es mucho más atractivo a simple vista: la posibilidad de que el usuario elija el diseño de la página principal, los post en forma de ventanas emergentes,... Otra novedad interesante (y muy relacionada con toda la moda "wiki" de la web) es la opción "send feedback", en la que permite al lector realizar anotaciones sobre el contenido publicado.


Muy "chulo", si señor. Pero al final he vuelto a las plantillas "de toda la vida". Para mi gusto, quedan muchas herramientas que incluirle: no permite añadir gadgets (todos estos complementos que, en mi blog por ejemplo, están en la columna de la derecha). De esta forma, el que entra en una página no sabe quién es el autor, ni puede consultar el blogroll, ver nuestros últimos tweets,... O aquello con lo que cada autor decida completar su publicación.

La conclusión final es la que en la facultad nos han repetido una y cien veces: lo más importante del diseño no es el aspecto físico, es la usabilidad. Eso sí, estoy segura que Blogger no tardará en aplicar mejoras a ese nuevo formato.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Un parón interactivo

Quién hoy vaya con prisa, que no se detenga en la página de Google. Seguro que muchos ya han encontrado un hueco en su apretada agenda para averiguar que le pasa al curioso personaje que hoy es su protagonista. Creo que debe ser la primera vez para la mayoría de usuarios del buscador que pasan cinco minutos en esta web, sin introducir ni un solo carácter en la ventana de búsqueda."Cinco minutos". Y no se si es necesario recordar que el tiempo es oro también en Internet. Así lo demuestran las estadísticas sobre medios online y sitios web, que aseguran que nos sobra la mitad de los dedos de una mano para contar cuántos minutos pasamos de media en una url. Un "vistacillo" rápido y a por otra cosa, mariposa. Como iba a ser si no en un soporte en el que la inmediatez es una de las características definitorias?

Pues sí. Hoy Google ha conseguido retener a más de uno todo ese tiempo gracias a una "simple" aplicación interactiva. Reconozcámoslo: nos gustan los "jueguecitos", sentir que nuestra interacción cuenta, aunque le guión multimedia esté más que definido. Después de dos meses en la asignatura Linguaxe e Guión Multimedia (además de ver las aplicaciones de la web con ojos de friki) me da la impresión de que esta no está nada mal. Sí, es simple, pero está demostrado que el usuario medio no quiere complejidades.

Es curioso el mundo de la interactividad, como los programadores juegan con la capacidad humana de interpretar y predecir para hacernos creer que todo es fruto de nuestra propia agilidad mental. Y así Google vuelve a demostrar sus dotes de ente todopoderoso y consigue que nos detengamos delante de una "simple" animación en blanco y negro.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Internet VS. la desinformación electoral

Después del segundo debate televisado, de ser sometidos a oleadas de promesas y de palabras "biensonantes", estoy segura de que muchos españoles habrán modificado poco o nada su decisión electoral.

La actualidad informativa de hoy hablaba de dimisiones políticas a causa de faltas de respeto en redes sociales como Facebook y Twitter. Independientemente de su profesión, su actitud deja bastante que desear. Pero señores políticos, ustedes son personajes públicos y las redes sociales, como buenas "redes", están interconectadas y son capaces de atrapar a peces más o menos gordos.

Para los indecisos, AQUÍ va una herramienta bastante interesante, aunque sea a modo orientativo. No lleva mucho tiempo responder unas cuantas preguntas generales y la opción de comprobar la posición de cada partido en relación a estos temas puede ser un buen resumen global de los principales programas.

Para los que quieran alternativas al bipartidismo y prefieran basarse en cifras concretas, ESTA WEB muestra las partidos minoritarios con más posibilidades en cada provincia.
Y hablando de minorías y haciendo uso de la naturaleza multimedia de la red, un CANAL DE YOUTUBE que permite conocer de manera rápida las opiniones sobre distintos temas de los 18 partidos participantes.

Una vez más, Internet muestra su utilidad permitiendo la difusión de herramientas como estas. Por mi parte, otro voto por el conocimiento de causa.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

¿Hasta dónde vamos a llegar?

Un día cualquiera, de golpe y porrazo, te encuentras frente al ordenador luchando contra la indecisión de que modelo de orla te gusta más, de cuantas copias de tu foto llevando birrete eres capaz de soportar y de si alguna vez descubrirás la utilidad de la banda de tu carrera. Parece que fue ayer cuando hicimos todos apiñados los exámenes de Selectividad... Por nuestra cabeza resuena constantemente la palabra "fin": trabajo fin de grado, viaje fin de carrera,...

Por temor a "gafar" la cosa, no hablaré todavía de balance final. Antes, queda el último sprint. Ese en el que, si entornas los ojos, puedes vislumbrar la meta y es justo eso lo que te da un aporte extra de energía para afrontarlo con más ganas.

Las ganas que no falten, porque este final es solo el comienzo de algo más. Somos lo que aprendemos, lo que almacenamos en nuestro conocimiento, interiorizándolo como parte de nuestro propio organismo. Un claro ejemplo:
nuevas generaciones que piensan que una revista es un iPad que no funciona correctamente... Han hecho suyos conceptos que para las generaciones precedentes (hace solo un puñado de años) eran imposibles de imaginar.

La tecnología sirve como metáfora: a pesar de todo lo avanzado, ¿hasta donde vamos a llegar?


No. Esto no es la meta. Esto, señoras y señores, es solo un ejemplo del presente. Existe, está en el mercado y se llama Kinect. Pero lo más increíble de todo, es que ya nadie duda de que va a ir a más.

martes, 8 de noviembre de 2011

Carretera y manta

Manda narices! Dos meses en Santiago y es la visita a tierras castellanas la que me hace volver a "dibujar en el aire" después de unas cuantas semanas de inactividad.

La adaptación a nuevos lugares siempre es lenta, a veces casi tanto como la propia estancia en ellos. Mientras oigo de fondo el debate (o la guerra de recriminaciones) de Rubalcaba y Rajoy pienso en lo afortunada que soy si realmente algún día llegan esos 500€ mensuales que me prometieron al adjudicarme una beca Séneca. Qué pereza escuchar como nuestros dos líderes políticos por excelencia se acusan sin parar de ser los causantes de todos los males habidos y por haber! Espero que los papeles para emitir mi voto por correo lleguen antes de que disminuya demasiado mi esperanza en que, ni ellos ni ningún otro, sean capaces de mucho más que de dejarse llevar por los acontecimientos.

La lluvia ya se ha instalado en Santiago, barnizando sus calles empedradas y convirtiéndose en compañera habitual del continuo goteo de peregrinos. Santiago tiene magia, un encanto especial... como tantos otros lugares de nuestra geografía (por no hablar de fuera de nuestras fronteras).

El viaje en autobús hasta Salamanca es un claro ejemplo de ello. Aunque el trayecto dura casi seis horas, el cambio de paisaje se produce de pronto, sin avisar y sin dejar rastro. Los frondosos montes de Ourense, supervivientes de la reciente oleada de incendios, se transforman "de golpe y porrazo" en las extensas llanuras castellanas. La vista busca sin resultado alguno los arboles amarillentos que forman frondosas riadas en tierras gallegas, pero solo encuentra un terroso mar en calma.


Diferencia, contraste,... allí precisamente reside la magia. En el poder comparar una cosa con la otra y apreciar el encanto de cada una de ellas. A lo mejor lo que necesitan nuestros políticos es un poco de "carretera y manta" que les recomponga la tolerancia y les devuelva la originalidad.